No puedo irme
sin dejar tres frases
con aspiraciones de verso;
todo bien gracias, la vida pasando
los chicos creciendo y mi esposa aguantando
mis dias otoñales y mis parentesis cansados y yermos.
El curro sin novedad aparente, sostenido entre hilvanes, a la espera
intentando guarecerme de los tiempos venideros de tormenta.
Mientras leo libros de historia, escribo en mi cuaderno esquemas
de cinco puntos como si estuviera
constantemente preparando temas.
La Consuelo se hace cada día más sabia y más vieja
mi hermana estrangula con ironia sus cuarenta
y mi abuela sonrie en un presente continuo
acercándose a la centena.
El otro blog se me está yendo
secuestrado por la pereza
y por la incapacidad de contar historias divertidas
de un tipo normal-bajo de clase media.
Pues no te va tan mal.
ResponderEliminarSiempre puedes escribir, en el otro blog, de cuando fuiste guardaespaldas de Michael o cuando visitaste el padre Ferrer.
Elchicodelaconsuelo se me está quedando como el jarrón que te regalo tu tia preferida el dia de tu boda. Precioso,le tines cariño, pero siempre con dificultades sin saber donde dejarlo,como limpiarlo para que no se rompa.
EliminarMuaks
Eso es la vida. Y la llegada a los cincuenta. Y la adolescencia. Y el fin del verano.
ResponderEliminarMe he acabado este verano todo Bascombe
EliminarAcción de Gracias se queda pegado a la existencia, aunque me falten un par de lustros para llegarle. Me ha gustado mucho.
Francamente franck me pilla demasiado lejos.
Muaks