La gente feliz lee y toma cafe (opinión)

Pero la verdad es que en esta novela
la gente no es feliz
fuma y folla más que toma cafe
y a penas lee.

El titulo sugerente,
el inicio poderoso
y Mulranny que se representa
con esas playas largas y solitarias
en Irlanda
como un remanso idóneo para deglutir la tristeza.

No os voy a contar el argumento
¿para qué si en la solapa solo falta
que pongan como acaba?
(Algún dia de estos
sacaré la escopeta
y me liaré a tiros con los reseñadores de solapas).
Solo os digo: tragedia familiar
mujer solitaria de buen ver
se larga a masticar intimidad y tristeza a un pueblo perdido.


Pero a partir de ahí las cosas
pasan a hipidos y de manera poco razonable.
Agnés Martín-Lugand
pertenece a ese grupo de autores
que ahora prolifera en cada pais
que se ha autoeditado un libro
lo ha puesto en Amazon
y la viralidad (creo que de gente facilona)
lo ha encumbrado.

Es el libro que te compras en Atocha
porque te gusta el título
"La gente feliz lee y toma cafe"
y antes de llegar a Calatayud
ya lo has terminado.

Y te dices pues vale,
pues eso,
vale pues...
¿está mal? pues no
¿bien? tampoco
a veces triste a veces blandurrrio.
...bueno, en lugar de ver
la peli del video de renfe
me leo esto,
pero a mi me gusta mas ojear
Paisajes desde el tren
¿qué quereis que os diga?
 
Y claro que después la gente cuando para
en Zaragoza Delicias 
le da bajón, (me parto)
pero la culpa no la tenemos nosotros la tienen
este tipo de libros
que te endiñan en las librerías
de las estaciones de las capis.

Y por qué me lo he leido
para chinchar a la nuera de la consuelo
que se lo ha comprado para el verano
y en un descuido
me lo he zampado de golpe
como el que se come aspirando
el flan del vecino
cuando se da la vuelta
¿no jugabais a eso?