Lo mio es un problema
de inteligencia básica:
no sé diferenciar
lo orgánico de lo inorgánico.
¿A qué cubo se tiran las pesadillas?
¿Van al cubo amarillo los falsos besos?
¿Van al cubo de lo orgánico
el latex
con exceso de pasión,
y al inorgánico
los amores de martes
con sueño?
Comentario en el blog de Pseudo
inspirante
como siempre!!
Muy bonito.
ResponderEliminarDifíciles cuestiones, yo creo que nada se tira, todo permanece
ResponderEliminarPrimero se repara,
ResponderEliminarluego se reutiliza
y finalmente se recicla
si no queda más remedio
que tirarlo.
Quizás
también nuestros afectos
tienen
obsolescencia programada
y se convierten en rutina
sin reciclar.