Nada,
desde la nada hacia la nada como opción,
personajes sin historia
renunciando a la salvación
renunciando a salvar el mundo
desde su mundo lisérgico
y voluntariamente inútil
(salvo que lo útil sea vagar para seguir viviendo).
Sin biblias ni leyendas,
personajes amputados,
perdidos en el desierto
tórrido, ilimitado, ensimismado;
tecnomúsico, monótono y distópico.
Y es en este camino sin trama,
en este mundo sin orden,
cuando se incorpora por azar el azar
sin consideración ni aliento, sin justicia social ni decoro
como en nuestro desértico vivir con corbata de cada día.
Es difícil y quizás idiota
subir de polizón buscando destino
en un barco sin rumbo,
en este barco de náufragos sin bitácora;
es difícil buscar buen puerto
entre navíos fantasma sin patria ni bandera.
Y es entonces
cuando el azar sin razón
o como razón
toma el mando
porque es imprudente querer colarse
con lógicas en mundos ilógicos
ser blanco desguarnecido en un tren de beduinos
que se encamina hacia el silencio desértico
tórrido, ilimitado
ensimismado
o sea, hacia la nada.
Soy del 50% que me ha encantado
No leáis nada
Solo id a verla
Asumo el riesgo de que me matéis luego.